Como ya sabréis, los plátanos me provocan migraña. Matemático: comer uno y dolor de cabeza al canto. Así que, aprovechando que llevo unos días bastante fastidiada con el tema he decidido prepararme un delicioso batido de plátano. Vale, para vosotros quizá os parezca una chorrada de receta, de batido, o lo que sea, pero para mí, que me encanta esta fruta y no puedo comerla… es un manjar de dioses. Es así.

No hay cosa más fácil, y rápida, de preparar y me parece una merienda estupenda.

¡Ah! próximamente os enseñaré cómo preparar helado de plátano (id congelando si queréis un par de plátanos en rodajas para tenerlo listo y no tener que esperar para preparar la próxima receta).

Los ingredientes que necesitaremos en esta ocasión son:

• tres plátanos
• una pizca de canela
• una pizca de cacao en polvo
• una cucharada de panela
• 200 ml de leche
• «La banana» de Ben Sa Tumba y su orquesta

Lo único que tenemos que hacer es cortar en trozos los plátanos y batirlos junto con la leche y la cucharada de panela con ayuda de una batidora.

Vertemos en los vasos donde vayamos a servir y espolvoreamos una pizca de canela y de cacao en polvo.

No tiene más misterio.

Anotaciones y sugerencias:

• Mejor si la leche está fría de antemano. Os quedará un batido súper refrescante.
• Aconsejo que lo toméis según lo preparéis porque luego el plátano se va oxidando y coge un color un tanto feo.
• Os recomiendo que probéis a añadir unas fresas. La combinación de fresa y plátano puede resultar de lo más exquisito.

En cuanto al ingrediente especial… creo que no necesita explicación. Además, os da tiempo a preparar el batido antes de que acabe la canción ¿probamos?

Pues eso, que lo disfruten… o no.